jueves, 4 de diciembre de 2025

El líder y el tiempo.


El líder y el tiempo.

En una mala planeación de negocio podemos perder dinero. En una falta de atención podemos perder bienes materiales pero en la vida, la persona que pretenda ser un buen líder, lo único que no puede perder es tiempo.

Ha concluido el primer mes del año 2016 y es un excelente momento para hacer una reflexión de cómo hemos avanzado en nuestra formación y educación de liderazgo tanto personal como social.

El hacer una primera pausa en el año, en este mes de enero que termina,  permite al líder replantear objetivos, ver lo que ha funcionado en la estrategia que se estableció, haciendo una evaluación detallada de los aspectos más profundos de la vida personal, profesional, económica y deportiva.

Ante una sociedad que cada día nos bombardea con millones de mensajes, el líder debe de estar continuamente atento a no perder el foco de lo que realmente es importante para su desarrollo.

Mantener bien focalizadas las metas, ayuda a saber si realmente se avanza o solo se está dedicando a hacer activismo fácil sin mayor trascendencia en la vida de los seguidores que se pretende influir.

El tiempo no perdona a nadie. No importa si tienes poder económico o no. El tiempo no se compra ni se puede negociar. Es tan importante una milésima de segundo que muchos deportistas pierden una medalla de oro olímpica por esa fracción de segundo al llegar en segundo lugar.

¿Cómo puede el líder en formación aprovechar mejor cada instante de la vida? Hay que trazar un horario y apegarse lo más que se pueda a los tiempos que se han fijado para cada una de las acciones planeadas. Además, el líder en formación debe priorizar las actividades más importantes y el tiempo que dedicará a cada una de ellas para resolverlas. Una persona con orden establecido podrá aprovechar mejor su tiempo.


Las condiciones en cada persona podrán variar durante cada día sin embargo, al final, todos llegaremos al momento en que solo quedará el balance de nuestras acciones que durante toda la vida hemos hecho y el tiempo sin misericordia terminará. El trabajar sin descanso en nuestra formación de líderes nos puede garantizar que llegado ese momento, nos sentiremos satisfechos de lo realizado con nuestra vida.  

El proceso de desarrollo personal y liderazgo




La transformación social de esta época, de las estructuras, de las ideas o de la forma de comunicarnos, nos empujan a avanzar en un proceso de desarrollo personal y liderazgo en nuestra vida, para reinventarse (personal y profesionalmente) y tomar las riendas de nuestra situación. Es imprescindible, que cada uno conciba un espacio de reflexión, para conocerse y hacerse preguntas sobre cuáles son nuestros auténticos objetivos y cómo estamos haciendo las cosas para lograrlos.

La finalidad de poner en marcha un proceso de desarrollo personal y liderazgo es tratar de dar respuesta a los nuevos retos que plantea el actual contexto socioeconómico, promoviendo el autoconocimiento y la responsabilidad personal. La búsqueda de nuestro lugar en este contexto y qué es lo que podemos aportar, de forma responsable, según nuestras capacidades.

De lo que se trata es de aprender a ser más conscientes, a desarrollar todo nuestro talento y potencial al servicio de una función personal y profesional útil, creativa y respetuosa.

Para ello, debe surgir la motivación de conocernos mejor y buscar los recursos a nuestro alcance para gestionar nuestro desarrollo personal y liderar los retos que afrontamos a diario. Esto también nos permitirá alcanzar un crecimiento personal en el ámbito profesional. No hay que olvidar, que para liderar a los demás hay que aprender a ser un líder de uno mismo.

Claves para el desarrollo personal y liderazgo.

Dentro de que, cada uno, tiene unas necesidades concretas, conviene seguir estas pautas para el desarrollo personal:
Promover la salud del cuerpo y la mente.
Tratar de dominar y gestionar de forma consciente los pensamientos.
Detectar y cuestionar creencias limitadoras.
Fortalecer la autoestima y la confianza en uno mismo.
Aprender a relajarse y cultivar el equilibrio y la serenidad.

Con esto podremos redefinir mejor los valores, las prioridades y las aspiraciones. En el ámbito profesional nos puede ayudar a:
Convertir los problemas en oportunidades, de aprendizaje y de mejora.
Mejorar la relación y comunicación con uno mismo y con los demás, potenciando la inteligencia emocional.
Desarrollar competencias y habilidades, y el descubrimiento del talento y la motivación.
Potenciar el autoliderazgo y la cultura emprendedora.


Estrategias para el desarrollo profesional.

La realidad laboral estará muy ligada a los cambios y transformaciones sociales, políticas y económicas que se avecinan. La era industrial puede ser sustituida por la era del conocimiento y eso obliga a reinventarse y adaptarse al nuevo mercado de trabajo que llega.

Las empresas demanda, cada vez más, profesionales que sean adaptables, con más competencias y habilidades en varios terrenos. Por tanto, es muy importante cultivar una nueva actitud ante la vida, aprendiendo a ver los problemas como oportunidades de aprendizaje, para interpretar mejor la realidad y sus cambios.

Esa cualidad será muy valiosa para las empresas. Verán en nosotros a potenciales lideres, capaces de generar nuevas ideas y enfoques, con retos motivadores para los compañeros, fomentado su iniciativa y creando equipos de trabajo más productivos. Alguien que se haya ocupado de su desarrollo personal sabe que es factible promoverlo y potenciarlo en los demás.

Todo lo que implique el conocimiento de nuestras habilidades, capacidades, virtudes o talentos innatos, nos conduce a un nuevo escenario profesional que, a su vez, nos puede descubrir cuál es nuestra auténtica vocación. A través de ello, podemos diseñar nuestros próximos pasos, para convertir nuestra pasión en una profesión.

Esto es lo más importante. Que lo que hagamos sea un reflejo de lo que somos.

martes, 2 de diciembre de 2025

La formación para ser un buen líder.




La aportación de este blog fue una recopilación hecha por Camila Sanchez, candidata graduada del programa Liderazgo Supera.
La formación de los líderes es esencial para cualquier tipo de empresa. El no formarse es quedarse atrás con respecto a tus competidores.
Por formación se entiende todos aquellos estudios y aprendizajes encaminados a aumentar y adecuar el conocimiento y las habilidades a lo largo de toda tu vida.
Muchas personas creen que tienen que nacer como líderes. Esto no es cierto. Si bien es cierto es que algunas personas nacen con ciertas cualidades que les dan una mayor disposición para el liderazgo, los buenos líderes se desarrollan con el tiempo.
Cada uno de los atributos de carácter de un líder deben desarrollarse para que el verdadero líder surja. Por ejemplo, no naces valiente. Puedes demostrar ser valiente cuando encuentres situaciones que podrían ser intimidantes, pero deseas hacer frente a estas situaciones en la cabeza.  Otros rasgos como comunicación, debate y resolución de problemas, son muchas de las habilidades que se desarrollan.
Al aprender estas habilidades y, sobre todo, saber cómo implementar en forma diaria, te permite cumplir con los objetivos y metas de tu trabajo.
La capacitación de liderazgo hoy en día no es una opción es una necesidad.
Empresarios, gerentes, jefes de equipo son situaciones complejas de  responsabilidades en las que tu forma de ser, de comunicarte y actuar tiene consecuencias para todo el entorno de trabajo.


lunes, 1 de diciembre de 2025

¿Cómo lograr el gran liderazgo?


Los líderes sacan lo mejor de los demás, pero los más exitosos van aún más
lejos: forman vínculos emocionales duraderos. La lealtad depende de este
ingrediente clave. La motivación profunda se desarrolla tras ello.
Tradicionalmente los líderes han tratado de ejercer control y poder. A
largo plazo esto no tiene éxito, y si ocurre, el resultado es represión
teñida de miedo: la gente se desempeña de mala gana. Un líder con
emociones positivas hace desplegar el potencial de cada uno. Se puede
decir que existe conexión por el comportamiento de los seguidores:

- Quieren estar en presencia del líder y tener contacto
- Quieren dar servicio y rendir al máximo
- Quieren compartir la visión del líder
- Quieren participar en el éxito del líder

No es un comportamiento servil, se trata de cómo funciona un grupo cuando
se siente inspirado. Toma interés en los demás y date cuenta de sus puntos
fuertes. Debes mostrar energía emocional. Excluye los tres elementos
tóxicos: autoritarismo, enojo y distancia.

Tener vinculación emocional no es lo mismo que usar el corazón en exceso.
Se trata de tener inteligencia emocional, para lo cual se deben cumplir
tres reglas simples:

- Estar en contacto con tus propios sentimientos
- Estar en contacto con los sentimientos de los demás
- Gestionar de una manera que nunca sea amenazante, pero sí inspiradora y
energizante

Hay principios básicos que surgen de la inteligencia emocional que te
permiten ser efectivo:

Libertad emocional: estar libre de culpa, resentimientos, quejas, ira y
agresión. No se pide que seas perfecto. Todos tenemos emociones negativas,
pero un líder las trata de manera eficaz por el bien del grupo. No da
señales contradictorias o tiene cambios de humor. Sólo con claridad puedes
confiar en ti mismo y que los demás confíen en ti.

Siente tu cuerpo. Sensaciones de opresión, rigidez, molestias y dolor son
emociones negativas que necesitamos reconocer y liberar.

Sé testigo de tus sentimientos. Las emociones nos absorben y tiñen nuestro
criterio, es inevitable. Pero si las observas de manera objetiva, la
influencia de los acontecimientos disminuye con el tiempo.

Expresa tus sentimientos a ti mismo cuando sabes que son destructivos.
Aprende a liberar tu negatividad en privado. No permitas que la ira y el
resentimiento persistan sólo porque te has marchado. Volverán a hacer
mella a menos que los liberes.

Asume la responsabilidad de lo que sientes. Cuando alguien te hace
enfadar, su responsabilidad radica en la corrección de un error, pero la
tuya se encuentra en el manejo de tu emoción. Date crédito a ti mismo
cuando manejes una situación difícil, sin estallar ni culpar. Asume la
responsabilidad cuando tus emociones tienen efecto adverso en tu
liderazgo.

Comparte tus sentimientos. Todos necesitamos un confidente que quiera
escuchar, comprender y ofrecer ideas.

Encuentra más perspectivas. Las emociones están ligadas a las creencias,
el ego y viejos condicionantes. Desactiva la tendencia egocéntrica
pidiendo tantos puntos de vista como sea posible.

Hacer estas cosas no sólo es bueno para ti. Cuando estás emocionalmente
libre, haces que la gente esté cómoda y feliz cerca de ti. Les hace estar
con energía.

En cada situación convierte en un hábito hacerte las preguntas clave de la
inteligencia emocional: ¿Cómo me siento? ¿Cómo se sienten? ¿Cuáles son los
escollos ocultos? Un líder que pueda responder estará en condiciones de
crear vínculos emocionales duraderos.

domingo, 30 de noviembre de 2025

La paradoja del liderazgo



“Liderar es servir, nada más y nada menos”
André Malraux, Filósofo Francés
Las personas se están auto-limitando todo el tiempo. Ya sea por una falta de auto-estima, poca seguridad en si mismas o infinidad de otras posibles razones, los seres humanos, sobre todo a medida que se hacen mayores y crece su “experiencia”, tienden a auto-limitarse, a no verse capaces o con fuerzas o a contar con las habilidades necesarias para alcanzar sus objetivos y metas. Estoy seguro de que esto es algo que a menudo verás en los equipos que intentas crear y liderar. Muy frecuentemente constatarás como te describen falsas barreras a su éxito y te relatan innumerables problemas imaginarios…
Una de tus habilidades como líder pues, es aprender a mostrar a tu gente que pueden conseguir mucho más de lo que ellos mismos creen. Demostrarles, de hecho, que ellos también pueden ser líderes un día igual que tú. Una de las razones más poderosas por las que te admirarán por tanto, es porque puedes ver su potencial, siempre ves su mejor lado y se lo muestras.
Puede que seas la primera persona en la vida de esa persona que ha creído en ella, que ha reconocido su trabajo y por tu causa, se convertirá en más capaz de lo que ella misma creía. A veces puede que tu creencia en ella le haga sentirse incómodo. Y esa incomodidad volverá cada vez que le pidas que alcance un objetivo un poco más ambicioso. Pero a ti eso no debe importarte, tu seguirás presionando con tu creencia en ella, estirándola un poco más, haciendo que crezca cada vez un poco más, como persona y como futuro líder.
Uno de los más grandes “gurús” americanos en la cuestión del liderazgo en los negocios, Robert Greenleaf desarrolló el concepto del “liderazgo sirviente”. Su argumentación, que ha sido desarrollada por infinidad de autores posteriormente, quizás el más conocido entre nosotros sea James C. Hunter con su libro  “La Paradoja” (en inglés “The Servant: A Simple Story About the True Essence of Leadership”) es que un líder es alguien que sirve a aquellos que le siguen, y que continúa sirviéndoles todo el camino, especialmente a través del sacar siempre lo mejor que todos llevan dentro, y negándose a aceptar sus limitaciones auto impuestas o sus auto-negaciones.
Las personas que intentas liderar puede que tengan defectos como personas, como seres humanos, pero como triunfadores desde luego que no.
Greenleaf decía, “Cualquiera puede liderar a gente perfecta –si hubiese alguna. Pero no hay gente perfecta y los padres que intentan criar hijos perfectos seguramente terminarán habiendo criado a perfectos neuróticos”
“Es parte del enigma de la naturaleza humana que la persona ‘típica’ –inmadura, insegura, inepta, perezosa- es capaz de alcanzar una gran dedicación o heroísmo si es liderada con sabiduría. El secreto de la construcción de equipos está en ser capaz de aunar a un grupo de ese tipo de personas haciendo que crezcan y se desarrollen más de lo que normalmente harían”.
Un liderazgo eficaz, inspirador, focalizado en el servicio a los demás, es un método eficaz de extraer lo mejor de otros y desarrollar grandes niveles de auto-estima. Pero el trabajo empieza en casa…Si yo soy un líder, todo comienza con mi propia auto-confianza. Los humanos encontramos mucho más fácil seguir a personas con grandes dosis de auto-confianza. Nos resulta más sencillo unirnos a un proyecto en el que la persona que nos recluta es alguien claramente segura de si misma y segura de aquello de lo que habla.
La economía mundial y en particular la de nuestro país pasan actualmente por momentos difíciles, momentos de CRISIS… Pues bien, recuerda que en toda crisis se encuentra el germen de las mayores oportunidades, oportunidades de liderar a personas capaces.

jueves, 27 de noviembre de 2025

Los pasos para ser un buen líder


Lograr una promoción o encontrar un empleo de mayor nivel, ya sea una gerencia, coordinación o dirección, es el objetivo de muchos de nosotros en el corto,mediano o largo plazo. Uno de los principales retos al asumir uno de estos puestos es el manejo de personal. ¿Qué significa ser un líder? ¿Cómo ser un buen líder?

Un líder  es aquel que tiene subalternos a su cargo, sin importar su nivel jerárquico, e implica asumir un rol complejo que requiere conocimientos, competencias, empatía y compromiso. Es decir, es una persona que debe fijar los objetivos de su área y sus subalternos, definir estrategias, establecer qué tareas realizará su equipo, evaluar su desempeño, tener la capacidad de ser firme a la vez que ponerse en sus zapatos y aplicar las políticas de recursos humanos. 

Seis de cada 10 profesionistas mexicanos valora el liderazgo como el principal atributo de sus superiores, según una encuesta reciente de OCCMundial. Es cierto, el liderazgo es la habilidad gerencial o directiva por excelencia y consiste en la capacidad para influir en la forma de ser de las personas o en un grupo de personas determinado, haciendo que este equipo trabaje con entusiasmo en el logro de metas y objetivos.


Un líder es mucho más que un jefe, es una persona que tiene la capacidad de tomar decisiones acertadas para un grupo de trabajo, inspirando al resto a alcanzar una meta común; es una persona capaz de tomar la iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar y evaluar a un equipo de trabajo para lograr los objetivos de negocio de un área o una compañía.

Algunos de los secretos para ser un buen líder son los siguientes:

1)Tener conocimiento del campo en el que te desarrollas y los retos a enfrentar.

2)Tener confianza en ti mismo y capacidad de toma de decisiones.

3)Ser integro, poseer un profundo sentido de justicia para tratar a tu equipo y delegar oportunamente.

4)Ser flexible para modificar la forma de trabajo y las estrategias cuando sea necesario.

5)Asumir tu responsabilidad y ayudar a otros a asumir la propia.

6)Compartir el esfuerzo con tu equipo de trabajo y brindarles seguridad y sentido de pertenencia.

7)Generar una conexión con los miembros de tu equipo, ser empático y escuchar sus necesidades.

8)Dar retroalimentación positiva y estar dispuesto a recibirla.

9)Priorizar la comunicación, reconocer el trabajo de los demás y ofrecer oportunidades de crecimiento a tus subalternos

10)Tener la capacidad para armar un plan y seguirlo hasta alcanzar los objetivos


Los mejores líderes son innovadores y visionarios, son capaces de identificar oportunidades para la empresa y crear un ambiente que estimule la creatividad e impulse la productividad.

De acuerdo con uno de los mayores expertos en desarrollo potencial humano, Deepak Chopra, el liderazgo es una cualidad con la que se nace, pero que también puede formarse moldeando las actitudes de cada persona.

¿Cómo se forma un líder?




¿Cómo se forma un líder?
En nuestra sociedad muchas personas cuentan con las características de liderazgo que podría impulsarlos a transformar positivamente la vida de miles de personas. Muchos pueden llegar a ser grandes lideres, lamentablemente no todos quieren y existe un abismo enorme entre poder y querer.
Cuando un adolescente tiene la inquietud de formarse como líder, de manera natural surge la pregunta ¿Cómo lograrlo? ¿Cómo poder asimilar la formación necesaria para poder ser un líder que inspire a otras personas? Desde un punto de vista antropológico, la persona tendría que educar primero sus afectos e impulsos más primarios con que ha nacido, resultado de su temperamento, para dar paso después, al desarrollo y educación del intelecto.

Una persona puede lograr esto solo si forma y educa su voluntad. Cabe decir en este punto que el reto que supone para una persona tener un control total de su afectividad y desarrollo de su propio intelecto puede significar el reto más grande a vencer en su vida. La voluntad es el arma más poderosa para transformar la propia existencia del ser humano pero al mismo tiempo, será el reto más desafiante al que se enfrente toda persona que quiera ser un líder eficaz y comprometido.

El formarse como líder es un arte que se desarrolla con el tiempo con mucha perseverancia, paciencia y aprendizaje. No hay atajos, no hay pastillas milagrosas, no hay camino fácil para formar la voluntad y para convertirse  en una persona inspiradora de miles.