martes, 30 de julio de 2024

EL PAPEL DE LA ACTITUD EN LA MOTIVACIÓN

Por: Liderazgo y Equilibrio.
 EL PAPEL DE LA ACTITUD EN LA MOTIVACIÓN
La eficacia de las acciones de motivación que hagamos está condicionada por la actitud de cada persona:
Tus razones no son necesariamente suficientes para otra persona.
Tus razones pueden ser suficientes para elegir hacer algo pero no para elegir la actitud con la que se realiza.
Aun siendo suficientes las razones, la libertad en la elección de las actitudes siempre está presente.
Existe una serie de sentimientos que nos dificultan la elección de una actitud mental positiva. El saber manejarlos puede favorecer la motivación. Los sentimientos más importantes son los siguientes:
·         La incertidumbre y la falta de claridad: inseguridad.
·         Sentimiento de obligación: no entiendo el  porqué pero tengo que hacerlo.
·         Sentimiento de víctima: una persona a quien la vida le sucede.
·         Queja: su único beneficio sería el desahogo, el ser escuchado.
·         El miedo: a lo nuevo, al fracaso.
·         La culpa y el resentimiento: por no hacer bien el trabajo, por no esforzarse lo suficiente…
Existe una serie de estrategias que se pueden poner en marcha contra estos obstáculos, como son entre otras:
Ante la incertidumbre y la falta de claridad:
·         Neutralizar los rumores, identificándolos, transmitiéndolos al equipo para que se aclare la información.
·          No ser ambiguos en los mensajes, decir claramente a qué nos referimos.
·         Transmitir la información, sin omitir nada y cuidando la actitud al hacerlo.
·         Ser igualitario con la información, no contar más a unos que a otros.
Ante el sentimiento de obligación: se produce por falta de conocimiento de objetivos y resultados.
·         Comunicarlos.
·         Explicarlos detalladamente y de forma continua.
Ante el sentimiento de víctima:
·         Demostrar con hechos, números y datos las consecuencias de la conducta.
·         Hacer consciente a la persona de las consecuencias de la conducta.
Ante el sentimiento de queja:
·         Escuchar, atender los sentimientos.
·         Implicarnos.
·         Tomar nota.
·         Informar a la persona de los trámites que hemos realizado mientras llega la solución.
·         Si no llega la solución, informarla cuanto antes.
Ante el sentimiento de miedo:
·          Verlo como algo normal cuando hay que realizar una nueva tarea.
·         Controlar las reacciones propias y transmitir confianza.
·         Establecer metas parciales: conseguir pequeños éxitos da seguridad.
Ante el sentimiento de culpa: cuando no se hace el esfuerzo suficiente y el resto del equipo sí, se puede sentir “culpabilidad” aunque se disimule.
·         Descubrir el porqué no se quiere esforzar y buscar una solución.