¿Qué es liderazgo? (y
qué no es)
Actualmente hay muchísima información,
en particular sobre liderazgo. No es muy claro qué es liderazgo y
qué no es
En esta entrada sólo quiero proponer
una lista de conceptos que aunque algunas personas los relacionen, no tienen
nada que ver con el liderazgo. Esto es lo que no es el liderazgo (y lo que sí
es):
1. Liderazgo no es represión, sino servicio
El liderazgo es entendido como un
concepto opresivo. Donde el de mayor jerarquía azota a latigazos a los
subordinados.
Algunas personas incluso relacionan a
Adolf Hitler con el término liderazgo. El no entra como un verdadero líder. Él
era un político dictador, opresor y genocida que utilizó su poder de influencia
para el mal. Eso no lo convierte en un líder.
El auténtico liderazgo no se trata de
ser superior a los demás, ni de oprimirlos o tenerlos bajo control.
El liderazgo se entiende como algo
forzado, algo para satisfacer el ego y hasta egoísta porque el líder “sólo
busca su beneficio propio”. Por supuesto que esto no puede estar más lejos de
lo que es el verdadero liderazgo.
2. Liderazgo no es competencia, sino cooperación
Hay muchos casos en los que el líder de
un grupo no es precisamente el gerente del área, sino un compañero que
demuestra tener más influencia y comunicación con su equipo, que el mismo jefe.
Tampoco se trata de competir. Un
verdadero líder no intenta alimentar la competencia, sino la cooperación. Un
buen líder entiende que para alcanzar resultados extraordinarios, se necesita
un conjunto de personas trabajando hacia un sólo propósito de la mejor manera.
Esa manera se llama sinergia.
Cuando uno ve el trabajo de un equipo
bien formado y dirigido por un gran líder, no hace falta más que observar y
admirar el reflejo de su trabajo.
3. Liderazgo no es algo exclusivamente
organizacional
La jefatura y el liderazgo son
conceptos distintos. La administración y el liderazgo también. El liderazgo no
tiene que ver con ninguna posición empresarial, porque:
La jefatura, en cambio, sí necesita de
una jerarquía organizacional. La administración también.
Aún sin que tengas personas que
trabajen para ti, tienes alguien a quién liderar: a ti mismo.
Empezar por liderarte es el primer paso
–y el único que existe–, para seguir avanzando como líder y algún día poder
liderar a los demás con virtud y valores.
4. Liderazgo no es ser el mejor de un grupo, sino
ser el más apto emocionalmente para guiarlos
Como decía Andrew Carnegie, uno de los
empresarios más exitosos que haya conocido la humanidad:
“El secreto de mi éxito fue rodearme de
personas mejores que yo.”
–
Andrew Carnegie
Se tiene esa creencia de que el que
aspira a ser un líder, en el fondo quiere superar a todos, quiere ser el mejor
de todos. Error total.
En realidad el que aspira a ser líder,
sólo quiere ser de mucha utilidad para su equipo de la mejor forma que conoce:
sirviéndolos y fortaleciendo el trabajo en equipo.
Como te repito, el verdadero líder crea
sinergia, resuelve problemas y clarifica objetivos, entre muchas otras
actividades, por supuesto. Nadie dijo que ser un líder era tarea fácil ¿verdad?
Pero ¿y si no tengo un equipo?
No se trata tampoco de humillarte a ti
mismo y decirte: “tengo que ser superior, porque soy un inútil”. Es genial que
crezcas como ser humano y si trabajas en ese desarrollo personal, cada día
serás mejor que el anterior. Pero en lugar de eso, podrías tenerte paciencia y
decirte:
“Voy a trabajar conmigo mismo, no
contra mí.” Recuerda que el liderazgo no es competencia, ni siquiera contigo
mismo. Liderazgo es sinergia, hasta contigo.
¿Qué es trabajar contigo mismo y no en
contra de ti?
Aceptando y conociendo tus cualidades y
defectos. Trabajando en fortalecer tu autoestima en lugar de humillarte y ser
tan duro contigo mismo. Teniéndote compasión en lugar de regañarte por ser tan
débil. Esforzándote en fortalecer tus cualidades y no en ser menos débil, sino
más fuerte.
Andrew Carnegie construyó el imperio
del acero gracias a la sinergia de su equipo de trabajo: personas con más conocimientos
y habilidades que él en el la industria del acero. Él sólo tenía una gran
habilidad:
Saber liderarlos y organizar sus esfuerzos de grupo
para conseguir resultados extraordinarios. Esa es la esencia del liderazgo.
Por:Diego Peralta.