jueves, 14 de diciembre de 2023

Adolescentes líderes pensando en grande.

Las ocho universidades de la Ivy League quieren a esta estudiante.

Fuente: The New York Times.

Una estudiante de preparatoria no podía creer los resultados, que veía en su teléfono móvil, de los exámenes de admisión a las universidades a las que había solicitado ingresar.
Una a una le daban la misma respuesta: Harvard, aceptada; Dartmouth, aceptada; Princeton, aceptada; Universidad de Pensilvania, aceptada; Cornell, Yale, Columbia y Brown: aceptada, aceptada, aceptada, aceptada.
El 31 de marzo era un día lleno de expectativa y emoción porque las universidades de la Ivy League publicaban en línea sus resultados y Augusta Uwamanzu-Nna, una estudiante de la preparatoria Elmont Memorial, se convirtió en la segunda alumna de esa escuela en lograr un récord bastante peculiar: las ocho mejores universidades de Estados Unidos la aceptaron.
Gritó y lloró.
“Es increíble”, dijo Uwamanzu-Nna, de 17 años. “Aún es muy difícil creer que esto me haya pasado a mí”.
Su logro adquiere mayor reconocimiento a causa de la —cada vez más— feroz competencia por el ingreso, pues hay una reducción notable en los índices de aceptación de las universidades más prestigiosas. Por ejemplo, Harvard este año tuvo un índice de aceptación de 5,2 por ciento en comparación con el 9,3 por ciento de 2006.
Uwamanzu-Nna (que se pronuncia u-güa-man-SU-nah) es la segunda alumna de su preparatoria que obtuvo este logro; en 2015, el nombre de Harold Ekeh figuró en varios titulares debido a que 13 universidades lo aceptaron, entre ellas, las ocho de la Ivy League.
Representantes de la preparatoria Elmont dijeron que Ekeh, quien ahora estudia en Yale, ha sido una inspiración para los demás estudiantes de la institución. También comentaron que Ekeh es amigo cercano de Uwamanzu-Nna.
Al inicio del año escolar, Augusta habló con su tutora y le dijo que quería solicitar el ingreso en las ocho universidades más prestigiosas de Estados Unidos.
“La animé a hacerlo por que sabía que podía lograrlo”, dijo la tutora, Sanju Liclican.
Sin embargo, muchos consejeros especializados en el proceso de admisiones universitarias no recomiendan llevar a cabo esta práctica.
Dean Skarlis, presidente del servicio de tutoría del College Advisor de Nueva York, señaló que hasta para los estudiantes excepcionales es mejor solicitar el ingreso a unas cuantas universidades de la Ivy League, junto con varias universidades “probables” y un par de seguras.
“Con un índice de aceptación de entre el 4 y 12 por ciento, si los jóvenes ponen todos los huevos en esas canastas, la mayoría se quedará, probablemente, sin nada”, agregó. “Es muy muy competitivo”.
Sin embargo, Uwamanzu-Nna tenía mucho a su favor: un promedio de calificaciones perfecto que le permitió asistir a las clases más difíciles, fue seleccionada como la alumna que dará el discurso de despedida de su generación y fue finalista del prestigioso programa de búsqueda de talentos Intel Science Talent Search.
Uwamanzu-Nna dijo que estaba impactada por haber sido aceptada en tantas universidades; además de las ocho de la Ivy League, la Universidad de Johns Hopkins, el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), la Universidad de Nueva York y el Instituto Politécnico Rensselaer la admitieron.
Si Uwamanzu-Nna ya escogió una, no lo revela; dice que está interesada en bioquímica e ingeniería ambiental, y que está analizando las características de las 12 universidades y que pronto visitará los campus.
Todo esto le parece abrumador. “Es una decisión muy importante”.
Tiene hasta el primero de mayo para decidirse por una de las universidades.