viernes, 5 de julio de 2024

5 Cosas que debes hacer si tienes baja autoestima.


  Por: Desarrollo Personal / Juan Sebastián Celis Maya






5 Cosas Que Debes Hacer Si Tienes Baja Autoestima


Algunos piensan que la autoestima tiene que ver con qué tan popular eres con tus amigos, o con tener el “mejor cuerpo” del barrio; mientras otros consideran que deben lograr algo específico en sus vidas para tener buena autoestima.

Lo cierto es que no es nada es esto… Simplificando, la autoestima significa simplemente el aprecio que tienes por ti mismo, por lo que eres, por tus fallas, debilidades y todo lo que te conforma.

La diferencia entre alguien con autoestima y alguien sin autoestima, es que quien la tiene es consciente de sus capacidades y dificultades, y aprende a convivir de la mejor manera con ambas partes de sí mismo; mientras que el otro, está quejándose y dejando que sus obstáculos internos le impidan amarse y seguir avanzando.

Así que, ¿Qué puede hacer una persona que aún no ha sido capaz de apreciar sus propias características, de amarse como es y de salir adelante aprovechando y valorando lo mejor de sí mismo?.. Bueno, aquí vamos:

1. Crea Un Inventario De Autoestima
Nadie puede arreglar o mejorar lo que ni siquiera conoce.

Toma un papel y traza una línea en la mitad que divida la hoja en dos partes. Escribe una parte “Fortalezas”, y en la otra “Debilidades”. Escribe una lista de 10 cosas por cada categoría.

Luego, analiza de tus debilidades cuáles puedes convertir en cualidades, y empieza a trabajar en cada una con la intención de pasarlas al otro lado de la hoja. No importa cuánto tiempo te demores, puede ser meses e incluso años, lo importante es mejorar y nadie lo logra de la noche a la mañana.

Mantén siempre contigo este inventario, y sobre todo, aprecia y valórate por las que ya son tus fortalezas y cualidades. Saca esas virtudes a relucir siempre que sea posible.

2. Establece Expectativas Alcanzables
Las expectativas que se alejan de nuestra realidad y verdadera capacidad, destruyen nuestra autoestima gravemente.

A veces hasta las expectativas más pequeñas pueden hacer daño, al no ser realistas… Sobre todo, cuando dependen de que otra persona haga algo para que tú te sientas bien.

Revisa tu lista de expectativas, tanto propias como de otras personas hacia ti, y trata de aterrizarlas lo más posible. Deja de lado los pensamientos de que algo pase en tu vida que terminen decepcionándote por no suceder… Esto te ayudará interiormente a esperar cosas buenas que probablemente sí sucedan y por las que tú mismo, y nadie más, puedas trabajar.

3. Deja A Un Lado La Perfección Y Toma En Cuenta Tus Logros Y Tus Errores
La perfección es simplemente inalcanzable para cualquiera de nosotros. Déjala ir… Nunca vas a ser perfecto; nunca vas a tener un cuerpo perfecto; nunca vas a vivir una vida perfecta; ni unos hijos, ni un hogar, ni una relación perfecta.

En cambio, tus logros a lo largo del camino sí son reales, sí existen y sí están ahí. Reconócelos por su verdadero valor, admite que fue una gran hazaña haberlos conseguido, a pesar de que otros digan: “¿Eso?… Tan fácil”.

Lo mismo debes hacer con los errores… No piensen que eres mala persona por cometer un error, o que eres inferior a los demás, o que eres un incapaz. Los errores son trampolines de crecimientos y lecciones de aprendizaje… Mira a tu alrededor, todo lo que existe en algún momento fue un pensamiento de alguien que, muy probablemente, mientras trataba hacerlo realidad se equivocó varias veces, más nunca se rindió y nunca sintió que no iba a ser capaz.

4. Conócete A Ti Mismo
Sé que esto es algo muy popular, y a lo mejor dejaste de verle la importancia por ser una frase tan repetida.

Conocerte y auto-explorarte va mucho más allá de realizar el inventario de autoestima. Es también probar cosas nuevas, abrir la mente a diferentes puntos de vista, hacer cosas que nunca habías hecho, relacionarte con gente desconocida, etc.

A veces el entorno en el que te encuentras es un causante de tu baja autoestima, porque no te permite mejorar o reconocer el valor de las cosas que haces… Por eso, busca ampliar tus horizontes, y verás en otros terrenos lo capaz que eres y lo bien que se sienten contigo otras personas por lo que vales y eres.

5. Manténte Dispuesto A Ajustar Tu Imagen De Ti Mismo
No te quedes nunca atado a la persona que fuiste algún día.

Es muy común que la gente se sienta mal cuando piensa cosas como: “Antes era muy bueno para nadar 1 hora seguida… Pero ahora, ni siquiera aguanto 10 minutos”. Estos pensamientos no son sanos para tu autoestima, porque el cambio es algo natural y debemos amoldarnos a que suceda.

Encuentra siempre tus destrezas presentes y aprécialas. Si algo ya no hace parte de ti, déjalo ir y simplemente recuérdalo con una sonrisa. Ahora tienes nuevas características que puedes mejorar y engrandecer.

Si antes cometiste un error, no sigas lamentándote de él en el presente. Pasa la página y escribe un capítulo nuevo en tu vida, porque esta aventura no es para quedarse en un mismo lugar siempre, sino para explorar y descubrir cosas nuevas.
Advertencia: Algunas de estas ideas son un poco "extrañas" y por lo regular no verás a nadie cercano a ti llevarlas a cabo. ¡Y eso es genial!...
Significa que tú estarás un paso adelante de los demás, tomando acción para tu éxito con estrategias probadas que la gente promedio ni se molesta en revisar.

jueves, 4 de julio de 2024

¿Que limita a un líder a ser un mejor líder?



Por: José M. Pujol H.
Todos tenemos límites. No todos somos conscientes de ellos. Muchos quieren superarlos mientras que otros realmente no.


Para los líderes, vencer sus límites es algo clave si quieren seguir avanzando al próximo nivel. Pero la verdad es que hay muchas personas en posiciones de autoridad que parecieran no querer mejorar sus habilidades de liderazgo.

Cuando un líder está en un cargo y su departamento parece no crecer, lo más seguro es que se deba a su falta de influencia sobre su equipo de trabajo. Si todo parece ir igual a cuando el líder llego al puesto es porque no se está creciendo.

El conformismo y el liderazgo no van de la mano. Los cambios son el sello de un líder que lo hacen un verdadero impulsor de nuevos retos que llevan a todos a crecer hasta su máximo potencial.

Pero ¿Qué limita a un líder a ser un mejor líder?

En este Post quiero tocar solo 3 Actitudes que hacen que una persona no avance en su liderazgo a pesar de tener todo a su favor.

1) ¡Actitud de Sabelotodo!

Todos sabemos algo y a todos nos falta algo por saber. Saber lo que sabemos y estar conscientes de lo que no sabemos es el primer paso para avanzar.

Muchas personas que llegan a puestos de autoridad en las organizaciones cometen el error de creer que lo saben todo y que sus colaboradores están un paso atrás de su conocimiento.

El hecho de que se ocupe la oficina principal no significa que se sepa más que los demás. Un buen líder es consciente de esto y buscará rodearse de las personas correctas que puedan suplir sus áreas de debilidad. Reconoce que no tiene por qué saber todas las respuestas para poder ser eficiente.

Los líderes limitan su capacidad de liderazgo cuando adoptan una actitud de sabelotodo privándose de la oportunidad de aprender de la experiencia y conocimientos de otros.

Por lo general son aquellos líderes que interrumpen a sus colaboradores cuando éstos quieren aportar una idea valiosa que puede hacer que la compañía mejore o dan a entender al equipo que ya sabían lo que debían hacer y que estaban “a punto” de mencionarlo.

George Crane dijo una vez: “Endurecer el pensamiento es el presagio del fracaso…asegúrese de estar siempre receptivo a nuevas ideas”. Ser sabelotodo no es más que una actitud basada en la inseguridad personal y creer que la otra persona no debería brillar más que el líder.

Un liderazgo efectivo se rodea de los mejores y busca desarrollar a sus colaboradores a su máximo nivel. Los buenos líderes saben que hacer esto no solo mejorará el desempeño de toda la organización sino que elevará su propio liderazgo.

Las palabras escritas en la lápida de Andrew Carnegie son muy sabias en este aspecto: “Aquí descansa un hombre quien supo cómo conseguir la colaboración de mejores hombres que él mismo”. Los buenos líderes son humildes y buscan aprender de todos independientemente de su cargo o posición dentro de la empresa.

2) ¡Actitud de Superioridad!

No haya nada más dañino para una empresa o departamento que un líder con actitud de superioridad. No solo demuestra un desequilibrio emocional sino que además perjudicará el ambiente de trabajo creando una competencia insana.

Creerse superior está basado en una falta de conocimiento de las propias capacidades. Es pensar que porque se ocupa el puesto de director ya se tiene el derecho de humillar a los demás o verse a sí mismo como mejor.

Puede que el líder diga abiertamente que él es uno más dentro de la compañía pero su actitud podría revelar lo contrario: No saludar al equipo al llegar a la empresa, cerrar la puerta para no ser interrumpido, no dejar terminar las frases de sus colaboradores cuando hablan, llegar tarde a la oficina y salir más temprano que el resto, son gestos que demuestran una sensación (tal vez oculta) de sentirse superior.

Nadie es superior a nadie. Como seres humanos todos somos iguales. Lo que sí cambia es nuestro nivel de experiencia, de conocimientos, de experticia, de habilidades. Pero si esto no se traduce en beneficios para los demás no sirve de nada.

George Bush dijo una vez: “Usa el poder para ayudar a la gente. Porque se nos ha otorgado poder, no para avanzar en nuestros propios propósitos, ni para mostrarnos ante el mundo o tener un nombre. Solo existe un propósito para el poder, y es servir a la gente”.

Nada más incómodo que una persona pedante y si es tu líder peor. Los buenos líderes saben que no hace falta sentirse superior para ser el mejor. Ellos con una autoridad basada en el servicio logran engranar todas las funciones del equipo, colocando a cada uno según sus dones y talentos y haciendo del trabajo algo fluido.

La actitud de superioridad es una berrera altísima para un líder que quiera avanzar en su liderazgo. Será un límite que invisiblemente lo mantendrá aislado.

Los buenos líderes son aquellos que tienen un sano concepto de sí mismos y de los demás, sabiendo que todos cumplen una función vital para el excelente desempeño de la organización.

3) ¡Actitud de Importante!

Un cargo no nos hace líderes. Nuestro servicio es lo que amplia o contrae nuestro liderazgo a nuevos niveles.

Puedes encontrar a personas en posiciones de autoridad pero que su influencia sigue siendo la misma a pesar de los años. Por el contrario, también encuentras a personas que sin tener una posición son altamente influyentes.

El hacerse el importante por ser el “jefe” no hará que los colaboradores trabajen más o mejor. Puede ser que aparenten ser eficientes pero lo estarán haciendo desde sus habilidades y no desde su corazón.

John C. Maxwell dice muy acertadamente: “Los líderes sobresalientes apelan al corazón de sus seguidores, no a sus mentes” y también aclara: “Los líderes tocan el corazón de la gente antes que pedir una mano”.

No se es importante por el cargo que se ocupa sino por el efecto que su liderazgo tiene en las personas. Cuando un colaborador nota que su líder inmediato le apoya, lo anima a ser mejor cada día y está pendiente de su crecimiento, ese líder será de suma importancia para el colaborador.

Pero un líder distante, que dice con palabras que tiene una filosofía de puertas abiertas pero sus actitudes demuestran lo contrario, seguramente no será percibido como alguien importante para el equipo. No se trata de si me creo importante sino de que si realmente soy importante para alguien.

Una actitud de importante limitará a un líder para acercarse a su gente y poder servirles con eficiencia, por lo que cada vez lo mantendrá al margen de sus seguidores y su liderazgo no tendrá impacto en la organización.

Ser líder no es fácil pero tener las actitudes incorrectas le hará dar varios pasos hacia atrás limitando severamente su liderazgo. A nadie le gusta una persona que se crea un sabelotodo, superior y la más importante en el salón.

Por el contrario, una persona con una actitud de aprendiz, que no filtra el mensaje por el mensajero que lo envía sino que honestamente busca aprender, que además, no se muestra superior sino que valora y aprecia el aporte de cada uno y que a su vez, es humilde para reconocer que todos son importantes estará más cerca del éxito que cualquier otro.

Sé el líder que debes ser y empieza con las actitudes correctas para liderar. El esfuerzo se verá en los resultados!

miércoles, 3 de julio de 2024

¿Que hay dentro de la mente de un emprendedor?




1. Creatividad
El emprendedor es capaz de ver las cosas de manera diferente. Ya sea con nuevos productos o nuevos procesos, los emprendedores poseen la habilidad de ver los agujeros en el mercado y crear innovaciones para llenarlos. Se trata de la creatividad unida a la curiosidad:"que pasaría si". 
2.Predecir vs día a día 

Los emprendedores tienen una idea de como quieren que sea su negocio y día a día trabajan por hacer que así sea.
Para muchos estudiosos del management eso es una de las causas de los fracasos pero para mi es una virtud. El actuar bajo un plan de empresa definido previamente a la apertura del negocio encorseta las habilidades emprendedoras.
¿De qué vale un plan de negocio para el lanzamiento de un nuevo producto o entrar en una nueva actividad si no podemos retroalimentarnos diariamente de lo que aprendemos día a día? El emprendedor posee la capacidad de aprender día a día y llevarlo a la práctica, algo impensable en los ‘cuadriculados’ planes de empresa de las grandes compañías.
3. Comodidad con la incertidumbre
Los emprendedores juegan con la incertidumbre de lo que podrá pasar mañana. Hay gente que no puede trabajar bajo esa presión, sin embargo los emprendedores suelen estar relativamente cómodos en su actividad siendo conscientes de que al día siguiente cualquier cosa podría pasar.
No es que se encuentren cómodos con la incertidumbre, pero si que saben manejar mejor la situación que otras personas.
4. La experimentación diaria
A la comodidad de las tareas rutinarias, los emprendedores van más por la experimentación diaria.
Cada día se presenta como una nueva oportunidad de experimentar en su negocio y conseguir mejores resultados que el día anterior.
La capacidad de experimentar con productos, procesos y resultados, no importa donde los resultados pueden conducir, es el elemento clave de esta cualidad. Eliminar expectativas sobre resultados y dejar que estos lleven a direcciones completamente nuevas es una característica de la mentalidad empresarial o emprendedora. 

5.Humildad en su actitud y proyecto 

Los grandes egos pueden destruir las mejores ideas. Los empresarios que están comprometidos con la solución de un problema de su negocio o la reinvención de un producto o servicio, poseen una humildad en ello. Los emprendedores pueden generar y promover sus propias ideas, pero ademas son proclives a buscar la colaboración de cualquiera que contribuya al éxito del proyecto. Tiene mas desarrollada la habilidad colaborativa que muchas otras personas
Por: Luis Villares

martes, 2 de julio de 2024

El liderazgo de equipos exitosos


Por: Conexión ESAN 


Se tiende a pensar que los equipos de alto rendimiento, que suelen ser auto dirigidos, no dan cabida a la presencia de liderazgos; sin embargo, esto no es cierto.

Una buena parte del trabajo de los equipos exitosos depende en gran medida de la aparición de liderazgos claros.

El funcionamiento adecuado de un equipo de trabajo depende, en buena medida, de una correcta asignación de roles y responsabilidades. Esta definición requiere de una estructura para que el trabajo del equipo, como conjunto, sea eficiente, eliminando la repetición de tareas y logrando una adecuada asignación de recursos. 

La distribución de las tareas requiere de liderazgos no solo al interior del equipo, sino también desde la alta dirección. A su vez, este debe saber comunicar su visión y expectativas respecto a los resultados del equipo.

Se debe tener en cuenta que reunir a los mejores talentos en un equipo de trabajo no siempre asegura los mejores resultados, como se demostró en un caso de la Harvard Business School, "El equipo que no fue", en el cual colisionaron egos e intereses particulares de los integrantes del equipo de planeamiento de una empresa, todos ellos ejecutivos de alto nivel y de excelente perfil profesional. 

En consecuencia, la gestión del conflicto y de las personas constituye un eje central que debe considerar un líder al encargarse de la gestión de un equipo. Para ello se requiere conocer el estilo con el que cada uno de sus integrantes prefiere afrontar el conflicto, así como el nivel de sus relaciones interpersonales. No hacerlo puede ser el primer paso, como en el caso comentado, hacia el fracaso del equipo.

En otros modelos de equipos es necesario que los líderes sepan delegar y empoderar sus integrantes, dándoles responsabilidades sobre tareas y funciones específicas. El líder, en estos casos, suele actuar como facilitador, y entre sus actividades se encuentra la relación con otros equipos y su interacción para que, en conjunto, puedan alcanzar las metas planteadas por la dirección de la organización.