Escrito por: César Piqueras Gómez de Albacete
El primer problema de liderazgo consiste en no ser ejemplo. Liderar desde la palabra, la teoría y la intención es muy fácil, pero es mucho mejor, aunque mas difícil, ser de aquellos líderes que se remangan la camisa para ser los primeros en involucrarse en lo que están haciendo. La palabra liderazgo, sea político, empresarial o institucional, implica cierto tipo de estatus y es el estatus el principal enemigo del ejemplo. Aunque este no es el único problema es uno de los más comunes que se cometen a la hora de querer liderar a un grupo de personas
El segundo problema del liderazgo es cuando el estatus puede más que la misión y el líder se distancia de sus seguidores, enrocado en su trono, creando un abismo difícil de flanquear entre seguidores y seguido. En ese momento, perdida la humildad, el proyecto empieza a decaer, los seguidores a desilusionarse y los resultados a ser mediocres.
El tercer problema del liderazgo es cuando, estando los seguidores poco involucrados, el líder se niega a aceptar la realidad. En estos momentos se pone una máscara, puro maquillaje para aparentar que todo va bien. Es entonces cuando más desoladora es la función del líder, pues trata de convencer a unos y a otros de que el proyecto es apasionante y con un gran futuro, sabiendo de una u otra forma que el proyecto hace aguas.
El cuarto problema del liderazgo es creerse más listo que los demás, perder la llaneza, la inocencia y la humildad, endiosarse, no darse cuenta de que el líder no es nadie sin seguidores. Creer que el papel de ser líder está destinado sólo a unos pocos y entre esos pocos estas tú.
En fin, así de difícil es liderar, nos faltan líderes visionarios ¡y buenas personas! si quieres ser efectivo al dirigir personas, evita los cuatro males del liderazgo:
1.-No ser ejemplo.
2.-Las diferencias de estatus.
3.-Distanciarse de la realidad.
4.-Perder la humildad.
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